16.4.05

La Chica del The Clinic

No me pierdo ningún número. Tampoco los colecciono fervientemente. Sólo los compro cada 15 días cuando aparecen en los kioscos. Esos benditos jueves me hacen feliz, siento que la patria se renueva y se libera a través de sus palabras. Son fuertes y a veces insultantes, pero hacen bien. Son un refresco de la sensación democrática. Claro que de repente me parecen medios exagerados con su "firme junto al pueblo", pero aún así me identifico con ellos.
No me digan que soy inconsecuente porque vivo en La Dehesa, en un barrio plagado de fachos y nuevos millonarios que se creen el hoyo del queque en sus Audi último modelo. No importa, porque antes vivía en Macul, también en Independencia y no me avergüenzo para nada. Creo que los barrios no hacen a la gente, y menos un medio como el The Clinic. Por eso lo leo siempre y antes, cuando tomaba el colectivo, me escondía detrás de sus páginas muerta de la risa mientras las viejas pitucas o los ejecutivos "top" me miraban con cara de espanto. He visto a todo tipo de gente con este diario bajo el brazo y créanme que me enorgullece pertenecer a ese mismo grupo que cree en la tolerancia, en la aceptación de los otros, en la no censura y en la facilidad para decir las cosas originalmente sin ser "caras de raja".
Me gusta el The Clinic y ojalá no se mueran nunca. También le doy gracias al juez Baltazar Garzón porque sin él este diario no se habría creado. Llenan un vacío que antes se sentía profundo. Cachen que yo siendo cabra chica, sin tener edad para votar pero que estaba plenamente conciente que en Chile no había democracia -por muchas cosas que sabía y otras por las que me enteré después- leía el Fortín Mapocho y me encantaba la Margarita. Es la misma sensación de plenitud que siento al leer el The Clinic. Y es verdad que el viejo Pinocho da pena y debería pasar a la historia. No soy de izquierda pero...
Tantas cosas que he leído en ese diario y edición que pasa no dejo de comprarla. Más allá de la risa también pueden decir lo terrible, eso que nadie dice y que todos sabemos. Son una Caja de Pandora en medio de la prensa actual, con tanto Copesa, LUN y Mercurio metido entre medio. Todavía creo que el Mercurio miente, y más que antes porque sabe que la derecha no tiene cabida para llegar a ser gobierno. Mejor que sea así, porque el día que un Lavín llegue al poder me iría de Chile...no me gustaría ver lo que estuvieran haciendo con mi país, aunque les aseguro que compraría el The Clinic a la distancia, encargado por Federal Express para tenerlo donde quiera que estuviere. ¡Larga vida al The Clinic!...ah! y también me encanta su sección Ay! El amor, donde en algún momento me dieron cabida para decir algo que necesitaba decir y no sabía cómo.

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