22.1.08

Chocolate

X: Ya se me olvidó lo que iba a decirte, siempre se me olvida
Y: Siempre se te olvida todo, ya no tienes memoria
X: Si la tuviera, quizás me arrepentiría de algunas cosas
Y: ¿Te arrepentirías de mí?
X: Eras una hoja de papel, que se me pegaba en mi cuerpo provocándome suspiros...
Y: Yo sentía que era hielo que nunca podría derretirse
X: Estás loca, era un infierno tenerte en mí
Y: Lo dices por el sexo, ¿o no?
X: No, lo digo por las consecuencias
Y: Las consecuencias
X: Sí, las consecuencias
Y: Las consecuencias que nunca fueron
X: No seas tan conmiserada conmigo, eso fue un error
Y: ¿El haberte amado?
X: No, el haber hecho cosas que no deberías haber hecho
Y: Ah, te refieres a lo que pasó la noche anterior
X: Eso no se hace
Y: Fue una llamada sin intención
X: No
Y: Sí
X: Podría abrazarte en este momento, pero no quiero
Y: ¿Te molesta mi piel?
X: Ya no me provoca
Y: Es mejor que me vaya entonces, si me quedo te pervertiré y terminaremos en el mismo lugar.
X: ¿Qué lugar?
Y: El paraíso que ya no existe
X: Mejor dejémoslo hasta acá
Y: Dices cosas horribles
X: La verdad es horrible, la verdad acerca de nosotros es horrible
Y: Entonces...
X: Entonces es mejor que no, que te vayas y cada uno siga su camino
Y: Ya no puedo
X: ¿Porqué?
Y: ...
X: Dime, el por qué
Y: Ya no estoy en tu vida
X: Yo te saqué
Y: No, yo misma me fui
X: ¿Y cómo?
Y: ¿No te acuerdas?
X: No
Y: Estás solo en esta mesa
X: No seas así, estás conmigo
Y: Ya no
X: No puede ser
Y: Sí, así es. Así de simple.

Enero, mes de teatro


El próximo 29 de enero a las 20:30 horas se estrenará "La Rebelión de las criadas", adaptación libre de "Las sirvientas" de Jean Genet con el grupo de teatro de Jaime Lorca Morales en el Teatro Facetas ubicado en Vicuña Mackenna 602. La obra, que mezcla la locura con el resentimiento social, busca hacer reflexionar al público sobre el papel de la servidumbre en un contexto atemporal. Será una función única que despertará la sensibilidad del público. Las entradas ya están a la venta, tienen un valor de $3.000. Consultas y reservas al mail morenamermaid2006@gmail.com o bien al celular 98184539.¡Los espero!

21.1.08

Desaparición

Me fui, me volví nada en la noche. Me volví más lejana que las copas de los árboles que vuelan entre las nubes. Me volví gota de agua evaporada, que no pudo ser pillada por nadie. Beso roto, que ya se evadió entre los dientes. Nada de nada. Podemos ser nada. Cerrar los ojos y desaparecer ante los ojos de los demás. Y ante los nuestros. Y ver nuestra carne mientras nuestra alma vuela por los aires, y va donde quiere. No es fácil volver.
Es más fácil salir.
Viajar al aire.

17.1.08

Pedazo de vidrio

Como gata alucinada por mis propios delirios, avanzo en medio de un tejado que tiene trizas, cuidándome de poner mis patas traseras donde corresponden, manteniendo mi cola en alto y la cabeza semirecostada en mis patas delanteras, con la cabeza en medio, mis ojos entrecerrados y avanzando lentamente, casi sin moverme, con un ritmo desapercibido que nunca desaparece. Controlándolo todo, casi aparentemente, con el pulso a medias, casi sin respirar, conteniendo el aliento, casi sin que me vean. Desaparecida, invisible, sin tensión, sin testigos. Una gata invisible, que se siente de color violeta, con ojos amarillos que resplandecen tanto de día como de noche. Más en la noche, porque de día es más fácil que nadie te vea caminando entre la muchedumbre. Que nadie te sienta, que sólo se perciba el aliento de un aire caliente en la espalda. En la zona entre el cuello y el comienzo de la columna.
Me sorprendiste. Eres alguien que conozco muy poco, que he visto muy pocas veces, pero el destino nos ha juntado un par de ellas. Eres un perfecto desconocido que me trastorna. Ayer, en el metro, en la estación Escuela Militar, me volví a encontrar contigo, ibas con una polera verde, hablando por celular. Con lentes oscuros, igual que yo. Raro, porque no esperaba que me pasaran cosas. Quería que me saludaras. Yo no quise hacerlo, iba pensando en todo lo que me quedaba por hacer, entre ellas el llegar luego a la estación Pajaritos.
Cuando hablabas por teléfono me hice la tonta, aunque sabía que me habías visto. Me miraste, te ignoré. Le dijiste a la persona con la que hablabas que ibas en Tobalaba, lo que era cierto. Te pusiste a mi lado, yo observaba la gente en el metro que se acumulaba más y más. Sacaste los audífonos de tu bolso y los conectaste al celular. No sabía donde mirar. Escuchabas música y saqué mi texto de teatro para repasarlo. "Repasarlo" debería decir.
Te acercaste. Estabas al lado mío. Me doy vuelta hacia el lado contrario y exhalas aire tibio sobre mi cuello. Algo me pasó. Apretaste tu cuerpo contra el mío, leíste lo que estaba leyendo. Continué ignorándote.
Te bajaste en Metro Baquedano y yo me quedé ahí, adentro del vagón, esperando que las puertas se cerraran. Me dí vuelta, ya no estabas. Me pasan cosas raras, y encima con un extraño.
¿Sabes quién soy? Una gata ahogada en un mar de gente.

15.1.08

Tercer ojo


Ajna una y otra vez.

Cada día veo lo que nadie más ve.

Me da miedo, pero sigo adelante.

Y eso de sentir a gente durmiendo en mi cama que no se ve.

Ajna una y otra vez.

14.1.08

Yo no soy tu ángel

Estaba en una silla de mármol y el frío se me acumulaba en la espalda. Ligero y denso, como una columna de aire concentrado a presión que explotara de improviso sobre mi cuerpo. Como miles de latigazos. Como una lluvia de latigazos que corrían y bajaban en un sector específico de mi cuerpo. Me retorcía en gritos agudos que nadie escuchaba. Todos me miraban y no eran capaces de ver más allá que a una mujer sentada en una silla de mármol que se retorcía, supuestamente, sin dolor. Que se retorcía de la nada, de espejismos. Que se retorcía sin sangre, sin ninguna evidencia física de daño corporal.
Me estaba reconstruyendo y eso nadie podía entenderlo. Tenía que dejar mi columna vertebral fuera para que me crecieran las alas nuevas y luego aprender a volar como los demonios. O sea, es que es sabido que ellos vuelan distinto a los ángeles. Su vuelo es pesado, acompañado de fuego, de pasos lentos y falta de ritmos. Atacan y una vez se metieron en mi cerebro con tanta fuerza que es por eso que se ha liberado este frío a presión sobre mi espalda. Me cortaron las alas blancas, ahora me saldrán un par de cartílagos a cada lado de la que antes era mi columna. Y experimentaré el dolor, ese dolor de la carne al aire vivo, que sufre por el oxígeno que la contagia y se deja redimir, dejar ser, ceder ante el dolor para cambiar.
Cuando el aire frío dejó de caer, un calor intenso me surgió de los pies, no podía moverme, mi espalda tenía la carne afuera, chorreando sangre y mostrando mi esqueleto a los que lo quisieran ver. Y todos se arrancaron, se fueron gritando y una inmensa cicatriz que comenzó con sangre coagulada se acumuló en la espalda. Más y más sangre que se ponía pesada y dura. Más y más sangre que formó una costra en forma de cresta en mi espalda. Y la cresta se endureció, se volvió pesada y firme. Doblando mi espalda en un ángulo de 45 º y dejándome ahí 30 días con sus 30 noches. Durmiendo. Sentada en la silla de mármol. Sin poder moverme.
De pronto, una voz en off me dijo que me parara, que ya podía estar derecha. Lo hice lentamente, mirando hacia atrás con miedo y sintiendo una lluvia invisible de sudor en mis manos. Recuperé el calor, recuperé mi oxígeno, recuperé la esencia de mí en un cuerpo distinto.
Mis alas son negras, enormes, pesan, pero mi vuelo me hace imponente. Mis alas tienen un olor extraño, como a carbón quemado. Me dijeron que ahora lloraba sangre y que cuando lo hacía, las estelas escarlatas eran sólo visibles para la gente que quería verme de verdad. Sólo unos pocos vieron esas lágrimas. Entre esos estabas tú. Y me siento en tu techo cada noche, durmiendo con los ojos entrecerrados, tratando apenas de difuminar la bruma que no me explica porqué antes podía ver la mente de la gente y ahora sólo veo mis propias pesadillas. Que me abruman.
Yo no soy tu ángel.
Ya no soy tu ángel.

9.1.08

Sudor

Por cada gota que cae hay una que sube por la piel y se mete en esos poros invisibles que te dejan las huellas de los sueños. Hay sudores que se quedan en las sábanas y que otro podría reconocer por su olor peculiar. Hay huellas mojadas que no se identifican, hay huellas mojadas que se sabe de quien son, pero se evaporan. Hay pieles que no se olvidan. Hay otras que es mejor borrarlas de la existencia. Hay algunas que se llenan de dolor y cicatrices, que luego caen y vuelven a renacer.
Me he imaginado en un árbol de agua, cuyo tronco me sostiene porque es de cristal. Y me dejo mecer. Como un hada, una ninfa de los bosques encantados. Y así, me vuelvo agua y etérea como el sudor, sin olor, sin sabor, con la frescura del viento que me mece. Con la paciencia de mi mente líquida, acompasada, con pasos livianos y en paz. Como la vida misma. Como el verano, como el verde de los árboles en torno a mí. Como mi sombra transparente, que huye y vuelve, dejándome en un aura divina. En mi ensoñación, esa de la que luego despierto para caminar.

8.1.08

El hoyo en la garganta

Como el angel se imaginara que uñas de metal diabólicas rasgan la tierra para carcomerla, una invisible mano de fuego entraba por su garganta y le generaba un hoyo a la altura de la laringe, que le provocaba dolor, mareos y una tos que terminaba con una opresión de cemento en el pecho, la salida de sangre por la boca y la falta de oxígeno en los pulmones sin dejar de acabar el rito de una enfermedad que se prolongaba por días y que sólo se olvidaba a la hora de dormir, aunque a saltos, porque siempre volvía la tos en la cumbre de las pesadillas, en el final de los demonios que se sentaban en el borde de su cama. Y le escupían los pies, para darle asco, destaparse y luego volvérselos a escupir.
(¿Continuará?)

6.1.08

Sopor...

No quiero ir a trabajar...necesito dormir en una hamaca, con playa, silencio, sol y palmeras...¿es mucho pedir?
Parece que sí.
Si me gano el loto renuncio.

5.1.08

2008!!!!


Una foto de Valparaíso, el 31 en la tarde, en el cerro Concepción...bonita forma de vivir el último día del año que recién se fue, para comenzar una nueva etapa, con miras a la vida que se sigue forjando dentro de mi destino, esas horas que pasan, esas cosas que pasan, esas situaciones y personas con las que te encuentras y te hacen feliz, pasar momentos agradables y aprender a quererlos y aceptarlos como son...deseo los mejores parabienes para todos, de todo corazón!!!