Comer, beber, amar...(del éxtasis a la tristeza)

Es increíble como los seres humanos pueden pasar de un estado emocional a otro. No cuesta nada. De las lágrimas a la risa hay sólo un paso. Y viceversa. Con cierta persona nos encontramos en un conocido mall de la ciudad. Lo acompañé a hacer unos trámites y la verdad es que me sentí muy contenta de verlo y de estar con él. No a ese nivel que uno espera, pero por el momento todo bien.

La química intacta, la piel quemante, los olores que aún siento y muchas emociones juntas. Como siempre, me dolía la guata al esperarlo y estaba demasiado nerviosa. Lo ví por el espejo retrovisor y es increíble la capacidad que tiene de cambiarme la cara con su sola presencia. Esos encuentros furtivos me alegran más de la cuenta y me hacen feliz.

Es una persona importante en mi vida y creo que sin él algo de mí muere (la locura???!!!) Almorzamos juntos y descubrí que el estacionamiento de un shopping sirve para bastante más que para estacionar un auto. Mucho más que eso. Y dale con decirme que estoy loca cuando las cosas que hago me nacen y antes que todo me fascina hacerlas. Creo que más allá del sabor es algo que no se puede explicar con palabras.

Nos separamos y hasta ese momento todo feliz hasta que suena mi teléfono y mi papá me dice que mi tata murió. Y así estoy ahora, en un estado plop que me cuesta entender que ya no esté. Yo no miro a los muertos en el ataúd porque me dan miedo, pero a él lo ví y me quedé tranquila porque no está sufriendo. Es un espíritu más en el aire, que está bailando tango en el cielo antes de luchar contra el dolor del cáncer y sumergirse en la profundidad de la morfina. Lo bueno es que no sufrió. La muerte con dolor debe ser lo peor. Ahora me quedo tranquila aunque algo en mí ha cambiado.

Aunque en un nivel distinto mi tata y el susodicho tienen mucha importancia en mi vida. Los dos son enormes, con unas manos gigantes y una espalda que da complicidad y compañía. Me sentía protegida por mi tata y con él, el otro, mi amante furtivo, en los momentos en que nos vemos, me puedo sentir como una niña pequeña que no le tiene miedo a nada. Nos miramos a los ojos y hay algo que no puedo explicar que va más allá de la química. Pero mi tata ha muerto. Nunca había perdido a alguien cercano. Me imagino el dolor que tiene mi madre. Es inimaginable. No le puedo decir lo siento...nunca lo he sentido.

Cuenta tu secreto...

No hay nada más entretenido que susurrar en el oído de otro palabras que salen de tu boca con tibios y débiles remolinos que se proyectan en el tímpano del receptor...

No hay nada más sensual que hablar en silencio. Decir sin palabras. Hablar sin sonidos. La piel responde.

Quiero un perro...

En mi casa no tengo perro. Cuando chica tenía un perro que se llamaba Peter. Yo no me acuerdo pero le metía el termómetro en el trasero (pobre trasero de perro) para tomarle la temperatura. Aprendí a caminar de la cola del Peter. Era un poddle color gris que le regalaron a mi madre. A veces echo de menos tener un perro en mi casa. Un perro te salva de la soledad y también de la locura. No recuerdo haber tenido amigos imaginarios, pero un perro sí. Hablaba con él, lo abrazaba y recuerdo que nunca me dejó sola. Cuando nací y llegué a la casa, el Peter se metió debajo de mi cuna y jamás me abandonó. A mi papá le ladraba. Mi padre odia a los perros. Dice que cuando chico lo mordió uno y desde esa vez quedó con trauma. A mí nunca me han mordido pero si sé que cuando ellos sienten miedo muestran las garras y tienes que arrancar si no quieres que te ataquen. A veces prefiero no pasar por los lugares donde ellos ladran mucho.

En todo caso, sé que los seres más felices de esta tierra son los perros que viven con quienes lo quieren, también sé que los perros vagos son los que más gozan de la libertad. En verano al menos. Cuando corren bajo los grifos de agua en las poblaciones y se llenan de barro sin esperar que nadie los eche. O cuando se echan a la sombra de los árboles, o cuando se meten en las obras de teatro callejeras y pasan a ser otros protagonistas.

Menos mal que acá la perrera no es violenta. Amo los animales y sobre todo los perros. Creo que ellos podrían enseñar una cátedra respecto al tema de la incondicionalidad. Incondicionalidad de compañía y sin esfuerzo. No piden explicaciones, no hablan y tampoco te hacen pasar malos ratos. Creo que cuando viva sola o con alguien en una casa tendré que tener un perro. Uno chico que sea, y que ojalá no tenga malas pulgas, que sea de genio adorable y pueda calentarme los pies en el invierno.

Espero no estar generando malas conciencias con esto que digo. Es agradable caminar con un perro por el parque, en los días de otoño o bordear el mar al atardecer en las vacaciones. Me gusta cualquier tipo de perro, menos los bravos. A veces desearía adoptar a uno callejero bañarlo, secarlo y desparasitarlo. Sería un príncipe sin corona. Que no tendría reino fijo, pero sí un lugar para soñar. ¿Sueñan los perros?, creo que sí. Al menos mueven la cola y sabes que están contentos aunque no digan una palabra. ¿Carne de perro?, no gracias, ahí sí que no podría.Estoy echando de menos al Peter. Nunca me avisaron cuando se murió y años después me dijeron que estaba enterrado en el patio de la casa de mi abuela. En una bolsa de basura.

Creo que la imagen lo dice todo...

Chicos y chicas...la cruda realidad de la política derechista en Chile...y...¡hagámosle caso! ¿ya?
Jajajajaja

¡¡¡¡Mátenme, por favoooorrrr!!!!!

Tal vez no soy la más indicada para decir estas cosas, pero una mala jornada laboral te puede arruinar el día por muy positivo que te levantes. Puede haber un hermoso sol, mucho calor, pero de repente las circunstancias te obligan a soportar situaciones que en otros casos te harían explotar. De hecho ahora mi cabeza está a punto de reventar y debo respirar con calma para no hacer una tontera que no vale la pena...lo he dicho.

Burbuja de HiElO

Las cosas han salido como quiero. Bueno, no todas, pero tengo la sensación de tener una mayor acpetación de mí a pesar de todo. Las cosas con calma no sirven pero tampoco es bueno cambiarle la velocidad a la vida. Todo gira como un torbellino y mi inquieta mente no ha dejado de ser lo que es. Muchas veces hacer marcha atrás no sirve. Ni siquiera con las intermitentes puestas. Creo que sería fundamental empezar a hacer otras cosas, a pensar en los sueños y no dejar de tener los pies en la tierra.
A veces eso puede ser difícil pues el ser human@ te obliga a tomar otras decisiones. Aún así, estoy feliz de seguir con mi vida, tener mi mundo y mis cosas, aunque me encantaría irme a vivir sola. Eso sí que lo requiero con urgencia. Tomar mis maletas y mandarme a cambiar sin darle explicaciones a nadie, ni poner caras ante los otros para que me digan que las cosas no son así. Nadie es perfecto. Nada tampoco y menos el resto del mundo.
Quisiera al menos poder ser hipopótamo y sumergir la cabeza debajo del agua sin ahogarme. Eso es fácil. O al menos sumergirme en el agua helada aguantando la respiración y sintiendo como el hielo de lo líquido hace que mis venas se tensen, se vuelvan cada vez más álgidas, pero a la vez más duras, menos frágiles, más resistentes a la humanidad de mi cuerpo. A la lesa humanidad de mis conciencias, mis médulas y mis células, a la torpeza inminente de los secretos que de repente salen de mi mente congelada y en vez de obstruir, destruyen los sueños negativos. Creo que cada cuerpo tiene su ánodo y su cátodo.
Todos podríamos hacer cortocircuito y seguir en la inmensidad de los relajos humanamente equivocados. Humanamente divinos. No le pongas alas a un peluche. Nunca vivirá y menos podrá volar. Nunca podrá interpretar su papel a cabalidad en el escenario. Alguien dijo alguna vez que éramos marionetas de un mal circo. Creo que la calidad del show depende de cada uno y de la forma en que queremos que nos vean. Y ahí sí que no hay nada que hacer. Los relojes avanzan y no podemos pararlos. Sería entretenido caminar hacia atrás sin la necesidad de girar el cuerpo en su totalidad.

Alma

Pierde la transparencia de los ojos y sumérgete en la oscuridad, que se apoderará de tu conciencia para liberar la verdad que ocultas dentro de tu cerebro. Los sueños hablan más que tu boca. Los sueños son el escape de la monotonía. Sueña, vuélvete fantasma y tu alma te lo agradecerá.

Mil ojos de colores

Quisiera por un minuto cerrar los ojos y soñar. Simplemente eso. Soñar que como dulce de algodón a la orilla de una playa con arenas blancas. Llevo un vestido blanco y estoy sin zapatos. Hace calor, pero la brisa es fresca. El agua me llama a nadar pero me conformo con sentir la frescura del viento. Hay una parte de la playa que tiene olas enormes de color calipso, con bordes blancos y espumosos, como un vestido de organza. No hay nadie. Ni siquiera me acompaña un perro. Pero mejor estoy así, me siento bien, me siento liviana. Mi cuerpo se levanta y comienzo a volar, salgo de la tierra y mis pies se despegan de ella, alzo mis brazos y sigo el rumbo del aire. Todo se hace pequeño. Todo se ve minúsculo y me siento la reina de las estrellas. Hay un sol que es abstraído por el horizonte. Me siento más pequeña aún ante esa bola de fuego. Y así, pequeña, me vuelvo ente desconocido dentro de una caja de vidrio...con miles de ojos desconocidos que me observan.

Feliz, feliz, feliz!!!!!

Puede ser ridículo o livianamente light pero pa mí es importante...¡me gané dos entradas para el concierto de Luis Miguel! y OBVIO que voy a ir...es OBVIO...creo que él es el amor de mi vida...siempre lo será, siempre siempre...me encanta y cuando esté ahí la emoción será enorme...ojalá hubiera un Luis Miguel presente en mi vida...sería terriblemente, elefantásticamente feliz. Aunque mi vida ha cambiado en este último tiempo mantengo esa tendencia a idolatrarlo, como muchas otras mujeres. Sé que hay harta gente que lo odia, pero me da lo mismo, ¡en gustos no hay nada escrito!

Súper Ocho

Ni siquiera con una cámara fotográfica se puede cambiar lo que el ojo ve...es cosa de saber lo que los ciegos sienten cuando palpan una fotografía, cuando con sus dedos captan nada a pesar de una gran imagen que puede contar una gran historia...más bien son apologías, pero no tienen nada de falso...es cosa de mirar los ojos del otro por más cinco segundos sin pestañear...si pestañea o cambia la cara es porque hay provocación, o sea, ¡nada que ver con los ciegos!

Y aunque digamos que no podemos ver, debajo de las sábanas es más fácil ver la realidad. Cierra los ojos, súbete las sábanas más arriba y luego ábrelos. Sólo te verás tú y una inmensidad blanca que te cubre.

Torbellino de algodón

Después de entrar a trabajar formalmente, ya apenas soportando el cansancio del primer día, mi mente en vez de descansar decidió darse vueltas y vueltas en la cama, buscando la posición precisa para acomodarse y dormir. Igual seguiré escribiendo en el blog porque lamentablemente la literatura sigue siendo un bastón mental que me importa, en todo caso creo que hay cierta aprehensión que me tiene preocupada. No es que me pase rollos. De nuevo la distancia me atosiga y me vuelve a ahogar. Sé que parece bastante apresurado, pero a veces es importante reconocer lo débil que te puedes sentir sin que realmente sea así. La debilidad no depende de uno, sino de la forma en que percibes la realidad.
Pero ahora, después de 48 horas de pensar estas cosas sigo diciendo exactamente lo mismo...o sea, creo que estoy en la cuerda floja. Lamentablemente mi corazón es el punto débil de mi existencia. Es complicado, y lo es desde hace tiempo, bueno, no tanto pero creo que al menos puedo decir que necesito que esta vez cedan por mí. Yo soy una buena chica, tengo bastante aguante y siempre doy lo mejor de mí. Sé que me valoran y sé que no me pueden responder por las circunstancias en las que se encuetran. Ahora lo único que quiero es verlo y disfrutar un pequeño momento que sea, un rato, nada más. Es que en el fondo siempre ha sido de ratos, pero a veces pienso que la vida se empeña en separarnos aunque ya tengo claro que no lo voy a dejar hasta que aparezca alguien potente, que le haga el peso en todo sentido y sobre todo que pueda tener un compromiso conmigo sin importarle lo que tenga que hacer con su vida.
En todo caso, todo está un poco más claro que antes....porque me costó entender que vivimos de momentos, me costó mucho y de hecho alguna vez le dije que tenía que aprender a verlo de otra forma y aunque ahora lo haga de alguna manera, no podré comprender el ciento por ciento de esta exquisita química que nos une y nos separa. Me encantaría poder robarle su calcetín, impregnarlo de su perfume y tenerlo junto a mí (cierto Lelita? jajaja) Es que en suma, hay un sentido de evolución que en nosotros no funciona...nos hemos quedado en la visión de la pasión más oscura, carnal, cavernícola y poco evolucionada que existe...pero al menos es algo verdadero, que nace de adentro y que muchas veces trata de tomar caminos separados por si nos separamos para siempre aunque nunca es así y en algún momento nos volvemos a encontrar, hablamos, la química se hace presente, me vuelvo fiera, el león y seguimos en la elipsis de algo que vale la pena por el momento. Y ojo, que me da lo mismo la presencia de ELLA, así como yo sé que a él le daría lo mismo que yo tuviera una pareja estable, sabiendo que vamos a estar juntos igual. Me encantaría que tomara una decisión, que me dijera que nos fuéramos a vivir juntos a un campo en el sur, que nos diéramos la gran vida y escapáramos de todo y de todos...pero a veces pienso que es mejor así, que en esta vida ya no estaremos juntos, que tenemos que aprovechar mientras se pueda. Por eso, hoy quiero hacerme un letrero gigante que diga "Mujer soltera busca"....aunque no soy sicótica en modo alguno aunque de repente me encantaría que él durmiera a mi lado toda la noche y despertar con su olor y su modorra encima mío, moviéndose como un animal, menéandome con todo lo bestia que es hasta romper mis sábanas blancas y luego tomar desayuno en el último piso de un edificio en el centro de Santiago...yo sé que encontraré a alguien con quien hacer eso, pero el problema es que con él ya no se puede y aunque se pudiera no funcionaría. De hecho, ni siquiera sé si le ha dicho a su hijo que tiene una tía especial. O sea, a mí los niños me encantan, siempre y cuando no sean mi problema...de hecho tengo harta paciencia y cuando chica quería ser parvularia...pero ahora con tanto pañal, comentario de gastos de guaguas y todo eso no quiero todavía...aparte que una guagua igual te quita la independencia y yo hasta el momento adoro mi libertad. Es lo más preciado que tengo y no lo cambio por nadie ni por nada.
Igual este año ya me hice la idea que no tendré vacaciones y soportar el silencio de Santiago en febrero me hará anhelar el fin de semana para irme a la playa o donde sea que haya mar para que me lleve lejos...si él supiera cuanto lo extraño, cuanto necesito verlo ahora, aunque fuera sólo un segundo, me diría que estoy cada día más loca y patética...me cagaría de la risa y le diría...Escoba! como él mismo me dice...Espero que nos podamos encontrar, aunque no sea una hot meeting...a estas alturas, me conformo con saber que soy una chica especial en su vida y en sus sueños, total el príncipe azul no existe y en mundo de solteras a veces los hombres son una pérdida de tiempo (pero sólo a veces)...
PD: Incluso deberían haber especímenes que no hablen, no se enreden ni nada, que simplemente actúen...¡a veces es lo único que queremos!

Leve e insoportable

Estoy resfriada. Me siento resfriada. Mi cuerpo me duele y mi nariz está extraña. Aún así, me siento leve. Me siento pequeña. Creo que mi pequeño cuerpo hoy amaneció un poco más chico aún. Mis huesos están igual pero la sensación del tamaño es distinta. Estoy flotando en un extraño líquido.

Estoy en la realidad, pero aún así en la fantasía de mis pequeñas cosas. Una sensación entre leve e insoportable. Leve, porque me he transformado en una pluma e insoportable porque hoy no me soporto. Me miro al espejo y no entiendo lo que veo. ¿Alguna vez todo el mundo se habrá sentido así?, es extraño, como si quien pareces ser no lo eres.

Como si por algún motivo hubieras tomado un líquido que dijera bébeme sin ver lo que pasaría hasta unas horas después. Algo así como una metamorfosis inesperada. Espero amanecer mejor, porque ahora, desearía no haberme levantado. O mejor dicho que de tan leve, me transformara en una pluma y saliera volando. Mejor vamos a volar (con la mente)...al menos es gratis.

Blu, blu blu

Este fue un fin de semana inusual. Estuvo excelente. Tomamos demasiado con mi partner (con la que estaba distanciada y tuvimos una buena reconciliación). Es raro como las vueltas de la vida, por muchas que sean, pueden dejar intacta una amistad verdadera. Y como los errores pueden importar aunque luego sean resultado de algo mejor.
No dormimos nada, salvo yo que pegué los ojos por una hora y media para volver manejando a mi casa. Hoy es lunes. Tengo sueño y estoy un poco pajera para funcionar. Estoy en Santiago y estoy esperando una llamada. Tengo que hacer unas cuantas cosas y necesito energía. Pucha que cuesta empezar la semana después del finde.
La única lata que me dio fue que cierta persona sigue remeciéndome las hormonas. Hablé con él, pero no mucho. Trato de no pescarlo. Igual sigue siendo irresistible, pero es mejor darse cuenta que nunca va a pasar nada. O como dijo la tía Angela "lo que no sirve hay que botarlo". No es que no sirva, tal vez a mí no me sirve. No es que haya que botarlo, sino que dejarlo ir. Aunque dentro de mí me daría el gustito por una vez si es que me dejara, pero todavía sigue comprometido.
Anoche antes de dormir nadé por una hora. El agua estaba fría. Es rico sentir como te mueves bajo el agua. A mí me da la sensación de libertad. Y el frío te hace adaptar la mente y los sentidos con otras percepciones. Luego, me dormí como un lirón. No me acuerdo lo que soñé. Me gusta recordar lo que he soñado, a veces es más fácil comprender la vida detrás de los sueños. Ahora lo que necesito es despertar, porque todavía no logro adaptarme al día. ¡Odio los lunes! Me pesan los párpados, mi cerebro anda más lento y el cuerpo lo tengo cortado. Más encima hay una lista enorme de cosas que hacer y al mirarla se me hace más larga e interminable. Las palabras marean.
Ahora necesito que algo me resulte. Tengo que esperar por eso. Ya dije que dejaría de comer pan por cinco meses si es que me resulta. Tengo fe en eso. Bastante fe en Dios y en que sé que está arriba observándome cada paso que doy. Tal vez necesite poner música de Pearl Jam a todo chancho. Eso ayudaría a despertar.

Vino, rosas y Madonna

No es chiste. La diosa erótica del pop entró en mí. Chicas, préstenme atención....una performance, una copa de vino, flores rojas en la pieza ad-hoc y la canción Erotica de Madonna les darán resultado. Bueno, también tienen que bailar como si estuvieran en un strip stease (con la pareja está todo permitido)...tendrán una excelente consecuencia. En todo caso, echo de menos ir a un motel. Es más entretenido. El problema es que como nuestras reuniones son de corto alcance debemos ir a un lugar accesible. Me encanta...pero creo que por la naturaleza de nuestra relación se podría definir estos encuentros como amistad+cariño+locura compartida+exquisitez+post mortalidad...lo complicado atrae...y creo que por nuestra parte (de los dos) es algo prohibido y oscuro...como un bolero en un boliche de Valparaíso, con las estrellas tras la niebla, el rumor de peleas de marinos y el sonido del taconeo de prostitutas. Más prohibido que todas las drogas juntas...creo que eso es todo por hoy...mi corazón está tranquilo y vapuleado...