
La femme sexy, futée, spéciale et chaude
de attendant quelque chose de spécial un certain moment
attendant une image sexy pour envoyer...
demain le message silencieux
En cela s'est levée du fait l'image je sera dans vos rêves pour toujours
Anoche tuve una pesadilla. No me acuerdo bien de qué se trataba, pero sólo sé que la molesta sensación de despertar con la polera entera mojada me desubicó. Recuerdo que desperté a las 6 de la mañana a tomar agua. Mucha agua. Y volví a quedarme dormida. No me gusta soñar y no saber lo que sueño. No me gustan las incertidumbres. Para nada. Hoy llego a la oficina y no debería haber venido. Mi jefe va a llegar tarde, a la hora que nos tenemos que ir. No hay nada urgente que hacer. No hay nada urgente que despachar. Creo que debería haberme quedado durmiendo. No me gusta estar sin hacer nada. Esta semana es la última del año y espero que lo que venga del 1 de enero en adelante sea lo mejor. Para mí y para todos los que me conocen. Todo lo que suceda en ese nuevo año tiene que ser lo mejor. Necesito mayor evolución y que las circunstancias permitan una sincronización entre lo que quiero que suceda y lo que realmente va a suceder.
Y hoy que parecía llegar la crema a la frutilla todo resultó a medias. Bastante a medias en realidad y no dejó de darme rabia. Una rabia interior profunda porque lamentablemente resulta ser verdad eso que dicen que mientras más difíciles son las cosas, uno más desea estar ahí y aunque se esté ahí y se haga todo para que la cosa en cuestión funcione, basta un mínimo detalle para mandar todo a la cresta.
Necesito olas, necesito energía. Estoy que agarro mi auto y me voy a la playa. Estoy que me escapo de la ciudad. Un respiro, un desahogo, una simple bocanada de aire marino inspirado y expirado. Me siento liviana, me siento bien. Ayer tuve un mini desahogo. Me hizo bien. Quedé demasiado relajada. Y supongo que él también aunque haya sido virtual la cosa. Esos encuentros de repente me descolocan, pero así son las cosas. Igual me extrañó que hablara de ciertos sentimientos que están, pero que nos conectan. Y fuerte, lo que no es malo, pero de repente se vuelve una experiencia insoportable. Y exquisita...aunque el peso se lo lleva el corazón y las mareas que de tanto en tanto nos atacan. 

Tengo los pies en la arena, una enorme mancha de arena que está en un escenario de tenues luces azules, que se mueven, que titilan. que hacen tiritar todo mi cuerpo con fuerza. Siento el frío. Es una playa lejana, un lugar distante que empaña mi mente y me hace soñar. Un lugar donde el océano se ocupa de mis neuronas y el mecer de las olas me otorga un ritmo calmo, silencioso, voraz y nítido. Estoy en silencio, sigo en silencio. Una luz blanca me ilumina y yo me retuerzo dentro de mi piel hasta transformarme en un ovillo de carne húmeda y silenciosa, que se vuelve cada vez más ínfima, hasta ser nada y todo a la vez.
He tenido un presentimiento intenso durante todo el día. La guata me ha dolido mucho. Y él no aparece y eso me tiene preocupada. Aún no recibo respuesta de su presencia en esta tierra lo que me aterra de sobremanera. Es raro él, y mil veces rara esa maldita sensación. Los días son similares a cuando supe que iba a ser papá. Yo soñé eso...y ahora temo que pase lo mismo. No creo que sea algo tan heavy, pero mientras no hable con él no me quedaré tranquila...no puedo quedarme tranquila. Eso se pasará cuando termine esto y lo que me tengan que decir me lo digan...y encima, me acuerdo de ese sueño y más terror me da. Los sueños que tengo son especiales. Los sueños que tengo me avisan cosas. Los sueños que tengo me hacen despertar asustada, mojada en transpiración y con la sensación que estoy saliendo de un abismo sin fondo que me atrapaba. Espero tener una respuesta pronto. Ojalá todo suceda para mejor. Por mientras, creo seguir conectada con él y aunque no me responda algo me dice a la distancia que no está bien, que algo le pasa, que alguna extraña situación lo controla o lo sobrepasa. No tengo idea. Ni siquiera puedo explicar que su mente se comunica conmigo. Y sé que si no responde es por algo...aunque me encantaría que me respondiera con hechos concretos. Así sea.
Me duele la cabeza. Estoy resfriada desde el jueves y no he podido recuperarme bien. O sea, sobrevivo, pero ando con las narices tapadas y me duele un poco la guata por los remedios. Creo que debería mejorarme luego. Más encima no ganó Michelle Bachelet y hay que ir a votar de nuevo. Una lata, pero creo que hoy en día los electores votan por caras, no por personas ni por partidos. No entiendo como el pedófilo de Novoa está en el senado y el asqueroso de Longueira, que tiene una cara pérfida de loco de atar también. Es el juego de la democracia, pero creo que si los electores tuvieran mayor cultura política los integrantes del poder serían más aptos para. Y encima tenemos el sistema binominal que me apesta, porque es el colmo de la desigualdad. El mundo es un lugar insoportable y al parecer nos tenemos que adaptar a ello.
Parece que a veces las cosas no hay que forzarlas, pero mi mente no entiende el significado de esa palabra. No significa que le vaya a torcer la mano al destino y de repente algo se enciende en mi cabeza: "Es lo prohibido, la necesidad de quererlo todo rápido, al instante". Asumo que en esos determinados momentos soy egoísta, pero a mucha honra, porque me lo merezco. O sea, si has sido una buena chica tienes que ser compensada, eso está claro a pesar de todo. Y yo no soy mala, al contrario. Parezco ser demasiado buena, aunque tengo mi forma de marcar presencia, lo que a veces suele asustar a algunos. Quizás demasiado susto aunque es la reacción que tengo. 
No hay nada más asqueroso que andar en auto sin aire acondicionado. Mi pobre cacharro se inflama del calor y yo ídem (como decía Papelucho). La lata es que las automotoras abusan por el aire acondicionado y me piden 700 lucas. No estoy ni ahí con gastar esa plata por el momento. Es más, creo que es una plata que preferiría gastar en otras cosas como ropa, zapatos, chocolates, una cartera, o ahorrar por último. Dicen que las mujeres gastan plata en cosas superficiales cuando están solteras y encuentro toda la razón. O sea, hay que aprovechar y cuando viene el matricidio se acaban todas esas libertades. A no ser que te cases con alguien que te pague esos gastos, pero como soy independiente, prefiero mil veces gastármelas yo.