11.11.05

Súper Ocho

Ni siquiera con una cámara fotográfica se puede cambiar lo que el ojo ve...es cosa de saber lo que los ciegos sienten cuando palpan una fotografía, cuando con sus dedos captan nada a pesar de una gran imagen que puede contar una gran historia...más bien son apologías, pero no tienen nada de falso...es cosa de mirar los ojos del otro por más cinco segundos sin pestañear...si pestañea o cambia la cara es porque hay provocación, o sea, ¡nada que ver con los ciegos!
Y aunque digamos que no podemos ver, debajo de las sábanas es más fácil ver la realidad. Cierra los ojos, súbete las sábanas más arriba y luego ábrelos. Sólo te verás tú y una inmensidad blanca que te cubre.

No hay comentarios.: