7.11.05

Blu, blu blu

Este fue un fin de semana inusual. Estuvo excelente. Tomamos demasiado con mi partner (con la que estaba distanciada y tuvimos una buena reconciliación). Es raro como las vueltas de la vida, por muchas que sean, pueden dejar intacta una amistad verdadera. Y como los errores pueden importar aunque luego sean resultado de algo mejor.
No dormimos nada, salvo yo que pegué los ojos por una hora y media para volver manejando a mi casa. Hoy es lunes. Tengo sueño y estoy un poco pajera para funcionar. Estoy en Santiago y estoy esperando una llamada. Tengo que hacer unas cuantas cosas y necesito energía. Pucha que cuesta empezar la semana después del finde.
La única lata que me dio fue que cierta persona sigue remeciéndome las hormonas. Hablé con él, pero no mucho. Trato de no pescarlo. Igual sigue siendo irresistible, pero es mejor darse cuenta que nunca va a pasar nada. O como dijo la tía Angela "lo que no sirve hay que botarlo". No es que no sirva, tal vez a mí no me sirve. No es que haya que botarlo, sino que dejarlo ir. Aunque dentro de mí me daría el gustito por una vez si es que me dejara, pero todavía sigue comprometido.
Anoche antes de dormir nadé por una hora. El agua estaba fría. Es rico sentir como te mueves bajo el agua. A mí me da la sensación de libertad. Y el frío te hace adaptar la mente y los sentidos con otras percepciones. Luego, me dormí como un lirón. No me acuerdo lo que soñé. Me gusta recordar lo que he soñado, a veces es más fácil comprender la vida detrás de los sueños. Ahora lo que necesito es despertar, porque todavía no logro adaptarme al día. ¡Odio los lunes! Me pesan los párpados, mi cerebro anda más lento y el cuerpo lo tengo cortado. Más encima hay una lista enorme de cosas que hacer y al mirarla se me hace más larga e interminable. Las palabras marean.
Ahora necesito que algo me resulte. Tengo que esperar por eso. Ya dije que dejaría de comer pan por cinco meses si es que me resulta. Tengo fe en eso. Bastante fe en Dios y en que sé que está arriba observándome cada paso que doy. Tal vez necesite poner música de Pearl Jam a todo chancho. Eso ayudaría a despertar.

1 comentario:

francisco josé dijo...

Sirenita:
Que sorpresa saber de ti. Sip, estaba algo desaparecido, escribiendo algunas cositas asi al pasar. Veo que tu estas bien, o al menos asi se te percibe en tu blog. Siempre llena de energía y con muchas ganas de hacer cosas. Eso es lo que yo quisiera todos los dias, contaminarme con esa energía rabiosa que tu emanas. A veces me arrano más de la cuenta ante la evidencia de tenr que hacer tantas cosas y no saber cuando terminar.
Te acordabas del italian lunch. Yap. encantado, nos ponemos de acuerdo y ya. Que rico - como dicen los españoles- me hace ilusión conocerte. Un beso y cuidate