16.3.06

Te llevo sobre mi piel...y bajo ella también


La verdad es que lo llevo en todas partes. Aunque no quisiera que fuera así, pero es la realidad de lo que vivo con X persona. Y no es sólo una cuestión de piel, es algo mucho más fuerte que eso...es la vida con X persona...lo que me ha dado, lo que no. Lo que hacemos, lo que no hacemos. Insisto en la necesidad de al menos un día poder despertar y sentirlo a mi lado durmiendo. Sentir su respiración en la espalda. Al menos lo tengo como un amigo. Es mi amigo fiel. Claro que de repente nos damos más ventaja de la que la sociedad entendería como políticamente correcta. Me da lo mismo.
Hablar de él es como hablar de alguien a quien se siente, se quiere, se estima y se saborea con intensidad. Es hablar de alguien de quien conozco sus manías. Hablar de alguien que mientras más barba se deja más me vuelve loca. Hablar de alguien por quien podría escribir un libro (claro que con otro nombre). Hablar de él es hablar de lo loco que me ha sucedido en estos últimos seis años. Hablar de él implica callar ciertas cosas. Hablar de él implica decir que me conoce demasiado. Hablar de él sería como contar una historia prohibida. Hablar de él es hablar de la pareja que fue, pero que nunca se mantuvo en el tiempo a no ser que sea clandestina. Hablar de él es tener dolor de guata antes que llegue. Hablar de él es darle -en este instante- un ego infinito.Hablar de él es hablar de alguien con el corazón. Hablar de él es armar un rompecabezas y de a poco sentir que todos los detalles de su cuerpo se dan a conocer, o se muestran como son. Hablar de él es decir que es un hombre que conocí en otra vida. Hablar de él es ocultar lo que se siente aunque los dos lo sepamos. Y lo sabemos bien. Tanto como para un instante de placer que llega, se disfruta y se recuerda con pasión. Hablar de él es sentirlo en la noche. O saber que está raro.
Pero no hablemos más de él. Hay cosas que me dejo para mí. Es un cangrejillo adorable.
Alguien dijo que los signos cánceres son seductores porque son lunáticos. Les creo. Les creo porque lo he visto con los ojos abiertos cuando estamos en un instante único. Pareciera que dos estrellas fugaces se encuentran y chocan. De ese choque surge la energía. Nuestra energía, nuestra piel.

2 comentarios:

Hermansineme dijo...

Hermosas sensaciones y sentimientos se han volcado en la red, pero no hay caramelos cuyo constante o periódico saboreo dure 6 años, a pesar de todo lo rico y todo lo bueno en apariencia, algo silencioso pasa: corrompe con caries la dentina del corazón, de lo que nos percatamos cuando ya nos comienza a doler mucho.
Si, el cáncer es, somos así y mucho mas, pero también tenemos tristes capacidades para prolongar placeres culpables en el tiempo. Función exitosa de titiriteros del sentimiento.

Sarah Rantes dijo...

*Amiga: no tienes idea de como te entiendo, a mi me pasa exactamente lo mismo con mi amigo Mao, al conzco hace ya 10 años..tanto lo he esperado, tanto he sufrido..imaginate q me mando a la mierda y estruvimos 1 año y medio sin hablarnos, me quito el saludop, crei morir..termine en el loquero..en fin
Ahora volvimos de "amiguis".. camigos poistmodernos, con ciertas ventajas q nunca marcan un límite. el es piscis y como buen pescadito se escapade mis manos, es refaloso y huye.
Este poema lo escribí hace un tpo pensando en lo q nos pas, creoq te sentiras identificada. Un beso
Patty

AMIGOS
Estamos juntos en un mar de deseo inconstante,
Y no cruzamos el río,
Y no perdemos el miedo
Nuestros dedos se han confundido asimilándose con los pálpitos
Y desviamos la mirada
Nos evadimos de lo que es, bailamos en encuentros fortuitos
No queremos desangrar pasiones
No queremos expandir errores
Pero la sabia de nuestros cuerpos está cediendo
Y manchamos alfombras invisibles
Nada de miradas, hablamos sin tocarnos
Los ojos arrancan despavoridos de centelleantes reclamos
Estamos perdidos y como arrancamos?
A lo no querido, a lo no esperado
Silencio y risas
El miedo nos inunda y soltamos nuestras manos.