24.7.11

Sigo siendo yo

Mi alter ego: La geisha asesina...
Ella nació del espejo.
No.
Nació de una performance.
Le gusta que la torturen.
Paga por eso...
Pero también mata.
Mata con el cuchillo de los siete colores.
Esos siete colores se reflejan en su pupila.
Y se transforman en la sangre del enemigo.
Generalmente sus enemigos son hombres.
Pasan a ser enemigos de ella después que se los folla.
Sus primeras víctimas fueron un abuelo y su nieto.
Primero, ellos les pagaron para que ella se los follara.
Luego, ella les pagó, en cash, para que ellos la torturaran.
La torturaron vendándola con un alusa transparente.
Y luego le taparon la cara hasta casi ahogarla.
Pero el nieto del abuelo le hizo un hoyo con dos dedos en la boca.
Y así la salvaron.
Pero, me encantan los peros, cuando respiró aparecieron los siete colores en su pupila.
Y a ella le dieron ganas de ver sangre.
Sangre que naciera de los cuerpos de ellos.
Entonces, al abuelo y al nieto les cortó pedacitos de la piel.
Unos pocos, suficientes para dejarlos adoloridos.
Adoloridos aullando.
Hasta que se aburrió y se fue.
No sin antes limpiarles la piel con alcohol y despedirse con un beso con lengua.