MALLAMI

No hay una ciudad que me guste menos en el mundo que Miami, bueno, empezando por el país en que está, que detesto profundamente, los Estados Unidos. Quizás podría gustarme Nueva York, pero el plástico de Miami ni cagando. Gente superficial, con vida superficial. Lo único que me agrada es su clima húmedo, casi tropical. Pero de lo demás, nada. De hecho nunca más volvería a ese lugar. Fui un par de veces y no le encontré ninguna gracia. Menos ahora que supe que mi ex está con la yegua de su esposa en ese lugar. Ando nostálgica como nunca, como que él me estuviera llamando y se hubiera metido en mi cabeza. No más digo, nunca más, pero mi corazón no lo mando yo, eso está claro...